El pasado jueves 6 de este mes, un turista estadounidense visitó el Museo Chiaramonti y exigió ver al Papa Francisco. Su solicitud obviamente no fue aceptada, lo cual llevó al turista a llenarse de ira y descargar esta contra un busto de más de 2,000 años de antigüedad.
Al caer la escultura, el rostro se quebró, perdiendo esta la nariz y mientras el agresor intentaba huir de la escena también dañó una segunda escultura. Se desconoce la razón por la que el turista solicitó ver al Papa, pero sus actos contra las esculturas llevaron a las autoridades del museo a alertar a la policía del Vaticano, quienes pudieron detenerlo y entregarlo a autoridades italianas.
Mientras tanto, las obras también fueron atendidas inmediatamente para dimensionar la magnitud de los daños y actualmente se encuentran en restauración. Por su parte, el museo asegura que se brindará capacitación a su personal para poder actuar de manera más eficiente y preventiva ante la posibilidad de futuros altercados como este y se discutirá una actualización de las medidas de seguridad que protegerán sus obras.
Fuente: ARTNews.